Es probable que tu hijo haya recibido a lo largo de estas Navidades algún aparato tecnológico o algún juguete en el que la tecnología esté presente. Con el paso del tiempo, los más jóvenes de la casa están cada vez más y más acostumbrados a los aparatos tecnológicos y pasan más horas frente al televisor, los teléfonos móviles y las tabletas electrónicas.
¿Es el uso de la tecnología beneficioso para los niños? Ni todo es bueno al 100%, ni todo es malo. Por ello, necesitas conocer cuáles son los puntos positivos y negativos de la tecnología antes de regalarle a tu hijo o sobrino algún aparato en concreto.
Ventajas del uso de la tecnología en niños
Una de las grandes ventajas del uso de la tecnología en niños está directamente relacionada con sus padres. Y es que gracias a Internet, podrás acceder a un contenido adaptado y útil, por lo que los más pequeños podrán aprender aquello que desees gracias a las diversas apps que se encuentran en las tiendas de aplicaciones.
Además, dado que podrás seleccionar el contenido que quieras, podrás controlar lo que el pequeño está viendo en la pantalla, algo que no sucede en televisión, donde el pequeño puede encontrarse con algún contenido poco adecuado.
Muchas de las aplicaciones son una gran opción a la hora de estimular la educación de los niños, así como la atención, la memoria, el cálculo mental e incluso la sociabilidad. En algunos juegos podrán jugar contra niños de otros rincones del mundo y entablar conversaciones con ellos al mismo tiempo que aprenden cosas nuevas.
Inconvenientes del uso de la tecnología en niños
Pese a que fomenta el aprendizaje, la tecnología también puede ponerse en contra de los más pequeños de la casa. Entre los principales problemas que puede provocar el uso de la tecnología entre los niños es que puede dificultar la sociabilidad de cara a las personas que habitan con él.
Además, si el niño pasa mucho tiempo frente a las pantallas, puede llegar a desarrollar una gran dependencia y adicción a los teléfonos móviles, por lo que es peligroso darles total libertad con los productos tecnológicos. Otra gran desventaja es que, en caso de que no esté supervisado, tu hijo pueda acabar en contenido que no sea adecuado a su edad. En la actualidad, es muy sencillo acceder a páginas para mayores de dieciocho años.
Por último, la tecnología puede provocar problemas posturales e incluso obesidad. Debido a la dependencia a los aparatos electrónicos, muchas son las personas que optan por quedarse en casa en vez de salir a la calle a jugar o a hacer deporte, lo que favorece la obesidad y el sobrepeso.
En definitiva, el uso de la tecnología tiene tantas ventajas como inconvenientes. Dado que tarde o temprano entrarán en contacto con ellas, es primordial educar a los niños de tal manera que puedan saber cómo actuar cuando se enfrenten a la pantalla por primera vez.
